miércoles, 17 de junio de 2015

784. DE LUTO



El diario La Rioja ha sorprendido hoy a toda la región con una portada de luto. Como no soy experto en hemerotecas, ignoro cuántas veces habrá optado por ese gesto editorial de pintar toda su portada de negro -no sé, muerte de Franco, atentados terroristas en la región, o... qué se yo...-, pero lo que nadie se explica es que la salida de un presidente local en las negociaciones postelectorales de un sistema democrático merezca una portada de luto.

El empeño en publicar fotos de Pedro Sanz que durante veinte años ha demostrado este periódico que tiene registrado el nombre de la región a la que "presuntamente" informa, ha superado los límites de la propaganda y ha rayado en el culto personal. No poca gente se divertía abriendo La Rioja en los bares y preguntándose en voz alta a ver cuántas veces iba a salir Pedro Sanz fotografiado. Una, dos, tres, cinco, ocho y ¡hasta diez fotos! gritaban algunos: en su despacho, en un pueblo, en una fábrica, en un discurso, con su hermano, en una fiesta, en cualquier lugar. Como dios, se solía decir, este tío parece que está en todas partes. ¿Será la muerte política de su ídolo lo que hace que el diario La Rioja se haya vestido hoy de luto?

Hace mucho tiempo que por una cuestión meramente ética no compro La Rioja, pero hoy he ido al quiosco a adquirir un ejemplar. Y es que como suelen decir los periodistas, esa portada es histórica: marca el punto más bajo a que ha llegado el periodismo en nuestra región. Un nivel para ser estudiado en las facultades de periodismo. Un nivel, verdaderamente de luto.